TEXTO: Mateo 7:12; Lucas 6:31; Números 12:1-13
ESCRITURAS COMPLEMENTARIAS: Romanos 13:10; Gálatas 5:14
OBJETIVO
Los estudiantes deben ser capaces de explicar por qué la Regla de Oro es la clave para una relación exitosa entre dos personas.
VERSO CLAVE PARA LA RESPUESTA:
Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos. — Lucas 6:31
VERSO CLAVE PARA LA BÚSQUEDA:
Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas. — Mateo 7:12
INFORMACIÓN DE REFERENCIA
El diccionario define la palabra regla como “una guía dictada para la conducta, acción, uso (de las palabras); una norma.” La palabra oro se describe como algo “de rareza preciosa.” El valor de la Regla de Oro puede ser mejor apreciada si consideráramos lo que sería el mundo si todos practicáramos esa regla. De hecho, las personas quienes la practican continuamente son consideradas como personas de gran valor. La Regla de Oro sólo puede ser seguida por aquellos en cuyos corazones abunda el amor de Dios, ese amor desinteresado presentado en la Escritura como la mera naturaleza de Dios. Es un amor espontáneo, amor altruista e implica el mérito de alguien amado. ¿Existe algo más único o precioso, hoy en día?
INTRODUCCIÓN
El mandato de amarnos entre sí es el gran principio que nos guía en la vida de discipulado. Nuestra lección de hoy gira alrededor del verso clave el cual a menudo es referido como la Regla de Oro. La práctica de este principio nos ayudará en nuestros tratos y negocios, en nuestra vida en el hogar, y en toda comunicación con los demás, ya que cubre toda relación personal. Al servir a los demás, nos servimos a nosotros mismos, debido a que a las personas les gusta tratar con aquellos que creen y practican la Regla de Oro.
PREGUNTA/RESPUESTAS
- Escriba la definición de la palabra regla. ¿Cómo se aplica a nuestra lección?
Las definiciones de sus estudiantes deben traer a la luz que una regla es una guía dictada para la conducta o acción. Así que, el curso de acción dictado por Dios a Sus seguidores se esquematiza en el verso clave. Discuta con sus estudiantes el hecho de que la Regla de Oro nos da una fórmula sencilla para determinar cómo debemos tratar a los demás en cualquier situación en que nos encontremos.
- Cierto abogado le preguntó a Jesús: “¿Cuál es el gran mandamiento en la ley?” Su respuesta se encuentra en Mateo 22:37-40. ¿Cuál es la similitud entre nuestro texto de la lección y la respuesta de Jesús?
Los estudiantes se darán cuenta que el amor es el punto principal de las relaciones cristianas y que nuestro amor hacia Dios dirige nuestras acciones hacia nuestros semejantes. La similitud se muestra en el hecho de que tanto la Regla de Oro como la instrucción de Jesús al conocedor de las leyes expresa la misma verdad. ¿Qué beneficios recibiremos si hacemos que esta regla regule nuestra conducta hacia los demás?
- Encuentre los siguientes versos y compare cada uno con la Regla de Oro. Dé una situación cotidiana la cual sería un ejemplo de cada uno de estos versos.
Proverbios 15:1
Romanos 12:8
Romanos 12:14
Romanos 12:21
Ejemplos de sus estudiantes de estos versos deben ilustrar que todas las Escrituras señalan a nuestra relación con los demás. La Regla de Oro es aplicada en cada incidente.
- ¿Cómo violaron la Regla de Oro Aarón y Miriam?
Ellos violaron la regla que gobernaba lo relacionado con los ungidos del Señor. Los estudiantes comprenderán que Dios no está contento con nosotros si practicamos la crítica o hallamos fallas en los demás. Así no es cómo desearíamos ser tratados por los demás. Pídales a sus estudiantes que ofrezcan otros ejemplos de desobediencia u obediencia de la Regla de Oro dados en la Biblia. Algunas sugerencias podrían incluir el Buen Samaritano, los hermanos de José, el propio José, Rahab, Abraham y Lot.
- Explique cómo la respuesta de Moisés a Aarón y Miriam fue correcta según la Regla de Oro. Lea Gálatas 6:1.
Moisés usó un espíritu de mansedumbre para restaurar a Miriam pidiéndole a Dios que quitara la aflicción en la cual ella se encontraba. Discuta y contrasta cuál sería la reacción mundana y normal a tal situación con la conducta de Moisés. ¿Qué efecto tuvo este hecho en Miriam y en Aarón? ¿Cuál podría ser el resultado en nosotros al seguir el ejemplo de Moisés?
- Jesús es nuestro ejemplo de Alguien quién vivió por la Regla de Oro. Se nos dice que debemos seguir Sus pasos. ¿Cómo respondió Él ante los insultos y sufrimientos de las manos de los demás? Lea 1 Pedro 2:21-23.
Cuando Él fue insultado, Él no insultó devuelta; cuando Él sufrió, Él no amenazó. En vez de eso, Él le entregó esos problemas a las manos de Dios quien juzga correctamente.
- ¿Cómo puede ser la diferencia entre la victoria y la derrota una respuesta apropiada a cualquier tipo de acción por nuestros semejantes?
Dé tiempo para que sus estudiantes puedan dar sus ideas con respecto a esto. Es probable que resalten que al mostrar bondad (practicar la Regla de Oro) se puede cambiar totalmente el desarrollo de una situación problemática. Aun cuando el problema no se resuelve en la forma esperada. Sin embargo, él tiene la victoria de saber que él ha manejado una situación en una forma que fue dirigida por Dios. Discuta con sus estudiantes que al demostrar pocas acciones de bondad cada día, demostramos también si sí o si no les estamos haciendo a los demás como nosotros queremos que nos hagan a nosotros. Si alguien nos maltrata, y como pago le hacemos algo bueno a él, quizá podemos ganar a esa persona por el amor que demostramos.
- Muchos piensan que si guardan la Regla de Oro, esto los califica para ir al cielo. Dé alguna evidencia en las Escrituras que apoye o rechace esta propuesta.
Permita que sus estudiantes expliquen sus respuestas, usando las Escrituras que ellas hayan encontrado. Concluirán que vivir en sus propias fuerzas según la Regla de Oro no es suficiente para calificarlos para entrar al Cielo. Algunas Escrituras posibles que apoyen esta declaración serían Lucas 13:3, Juan 3:3, y 1 Juan 1:8-9.
Provocando la mente: “Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, Aun a sus enemigos hace estar en paz con él” Proverbios 16:7.
PREGUNTAS COMPLEMENTARIAS
- ¿Cómo se siente sobre amar a alguien cuando usted sabe que ellos no lo quieren a usted?
- Explique cómo la caridad, el perdón, la misericordia, y la gratitud forman todas parte en la Regla de Oro.
- ¿Cuál es un ingrediente que usted necesita para llevar a cabo este mandamiento con éxito? ¿Por qué es este ingrediente (el amor) tan importante y de dónde lo podemos conseguir?
- ¿Por qué cree usted que es importante guardar esta regla y aplicarla a nuestra vida diaria?
- Mencione algunas cosas que usted podría hacer hacia los demás que le gustaría que se las hicieran a usted mismo.
- ¿Debe siempre esperar que los demás hagan por usted lo que usted ha hecho para ellos? ¿Por qué sí o por qué no?
- En nuestra historia de LA RESPUESTA, ¿qué cosa en la conducta de Diego confundía a Andrés?
COSAS QUE HACER
Deje que dos personas actúen cada una de las siguientes situaciones, luego discuta las situaciones con la clase.
1. Alguien tumba los libros de los brazos de un cristiano.
2. Alguien dice una mentira de usted.
3. Una persona invalida está caminando despaciosamente hacia una puerta, usted tiene prisa y ellos están en el camino.
4. Alguien deja caer algún dinero sin darse cuenta y sigue caminando. ¿Qué debe hacer usted?
5. Alguien está intentando ganarle para sentarse en el asiento donde usted desea sentarse.
Ponga de pie una línea de dominós y demuestre cómo cada uno reacciona al siguiente cuando son tumbados y luego todos se caen. ¿Cómo puede tener ese “efecto de dominó” nuestros ejemplos buenos en los demás?
Muestre un espejo a sus estudiantes, y dígales que siempre que ellos esperen algo de alguien, deben verse en un espejo imaginario y preguntarse si ellos harían lo mismo por los demás.
Traiga a clase una cartulina grande (recórtela en forma de una nube que represente los pensamientos de alguien) o use una pizarra. Escriba las siguientes frases (o algunas similares) sobre la cartulina o sobre la pizarra:
1. Recuérdame cuando sea Navidad.
2. Comparte tu barra de chocolate conmigo.
3. Sé amable conmigo.
4. No te olvides de mi cumpleaños.
5. Siéntate a mi lado y habla conmigo.
6. Encamíname a la casa y hazme compañía.
7. Ayúdame con mi tarea.
También escriba en un pedazo de papel, lo suficientemente grande para que toda su clase lo pueda ver, La Regla de Oro de Dios, para demostrar que podemos revertir nuestros pensamientos egoístas y dirigirlos hacia las otras personas. Presente estas ideas a los estudiantes y pídales que encuentren alguna cosa que esté mal en cada frase. Pídale a alguien que señale el error (las palabras “me” y “mi” se usan muchas veces). Hágales leer la Regla de Oro y luego dígales que corrijan cada frase eliminando la palabra que represente yo y la palabra mi y también pídales que las sustituyan con los nombres de sus compañeros de clase y con nombres de sus amigos.