FOREIGN LANGUAGES

Milagro en la Boda

Currículo
Primarios y Párvulos para Estudiantes
35

LECTURA BÍBLICA: Juan 2:1-11

VERSÍCULO PARA MEMORIZAR: Muchos creyeron en su nombre, viendo las señales que hacía. — Juan 2:23

Aun yo no había terminado de desayunarme cuando escuché a mi padre llamándome, “¡Apresúrate, Asriel, no debemos estar tarde!”
Mi padre era el jefe de los criados para la boda ese día en Caná, donde vivimos. Ya que era el hijo mayor, yo tenía que ir y ayudar mientras mis hermanitos se quedaban en casa y jugaban.
Mi padre lucía nervioso mientras llevábamos la carreta llena de provisiones para la casa. Nunca antes él había sido jefe de los criados. Él deseaba que todo quedara a la perfección.
Pronto la casa estaba llena con personas que venían de aquí y de allá. Ellos señalaban a varios lugares, apresurándose para tener todo listo. Mi padre estaba ocupado chequeando la comida y el vino. Él había gastado mucho tiempo sumando cuanto de cada cosa se necesitaba. Hice tantos viajes dentro y fuera de la casa que ¡estaba cansado aun antes de que la cena empezara!
Finalmente llegaron los invitados y la fiesta empezó. Escuché a algunas personas hablando con un hombre llamado Jesús. Yo no lo conocía y alguien dijo que Él era de Nazaret. Algo acerca de Jesús llamó mi atención y empecé a mirarlo.
Súbitamente, algo realmente desagradable ocurrió. Mi padre vino corriendo y me dijo que a los invitados se les había acabado el vino. Pronto estarían pidiendo más. Pero ¡no teníamos más! Mi padre estaba preocupado que nunca más él sería jefe de los criados.
Yo estaba trabajando cerca de Jesús cuando Su madre caminó hacía Él. Ella le dijo que el vino se había terminado. ¿Por qué ella hizo eso? ¿Pensó ella que Él iría a buscar un poco?
Regresé donde mi padre trataba de conseguir las últimas gotas de vino de las vasijas. Él estaba muy molesto. Entonces la madre de Jesús vino y dijo que deberíamos hacer lo que Jesús nos dijo.
Jesús dijo que llenáramos seis tinajas con agua. Mientras lo hacíamos, le pregunté a mi padre qué íbamos a hacer con ellas. Él me dijo que los criados no deben hacer preguntas. Sencillamente deben obedecer. Cuando las tinajas estaban llenas de agua, ¡Jesús nos dijo que llenáramos los vasos de los invitados!
Mi padre hizo lo que le fue dicho. Empecé a llenar los vasos también. Lo suficiente seguro, ¡parecía vino! Pero ¿qué sucedería cuando lo probaran?
El gobernador de la fiesta probó el vino. Con una mirada de sorpresa llamó al novio a su lado. ¡Él dijo que el vino sabía mejor que el primer vino! Mi padre estaba tan agradecido de que Jesús estaba allí.
Nunca yo había visto un milagro antes de aquel día. Desde entonces este mismo Jesús había hecho muchos milagros más en nuestra tierra. He decidido ser uno de Sus seguidores.

EL RINCÓN DE LOS PADRES

Los milagros de Jesús es el tema para nuestra nueva unidad de lecciones. Una base para este estudio debe ser un entendimiento de la palabra milagro. Tu hijo aprenderá que es un acontecimiento supernatural el cual no puede ser explicado por causas naturales.
Empezaremos la serie de cuatro lecciones con la historia del primer milagro de Jesús—cambiando el agua en vino en la boda de Caná. Su hijo aprenderá que Jesús está todavía ejecutando milagros hoy.
Mientras su hijo estudia el versículo para memorizar para esta lección, ayúdelo a aprenderlo escribiendo cada palabra del versículo sobre tiras de papel. Permita que él ordene las tiras en el orden apropiado. Tal vez él se divierta un poco pegando las tiras de papel sobre la puerta de su refrigerador, con imanes.

ACTIVIDAD DE LECCIÓN

DEVOCIONES FAMILIARES

Versículos para ayudar a su hijo a comprender esta lección Bíblica. DOMINGO: Juan 2:23 | LUNES: Mateo 17:27 | MARTES: Mateo 21:19 | MIÉRCOLES: Marcos 8:19-20 | JUEVES: Juan 4:53 | VIERNES: Juan 7:31 | SÁBADO: Juan 10:37-38