VERSÍCULO PARA MEMORIZAR: En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo. — 1 Juan 4:10
La mamá de Micaela y Carlos leyó en el periódico acerca de la Festival de Navidad en la ciudad de Oaxaca. Habría una obra navideña, cantantes, una venta de artesanía navideña y mucho más. La familia planificó hacerle una visita el viernes en la tarde y volver a casa el sábado. Eso les daría tiempo de sobra para ver todo.
Les tomó casi dos horas llegar hasta Oaxaca. Pero se divirtieron mirando el paisaje de invierno y las luces de Navidad por el camino.
La primera cosa que hicieron cuando llegaron fue hacer escala en un motel. Micaela, Carlos y la mamá esperaron en el auto mientras papá entró. Regresó pronto al auto y les dijo que no había habitaciones disponibles en ese motel. De hecho, el gerente le había dicho que ¡no encontraría ninguna habitación disponible en toda la ciudad!
“Supongo que el festival de Navidad es más popular de lo que pensamos”, dijo Micaela. “¿Qué haremos, papá?”
“Si no podemos encontrar un cuarto en el pueblo, entonces pienso que tendremos que regresar a casa esta noche”, contestó papá. “Nos quedaremos y veremos la obra navideña de cualquier manera”.
Hicieron escala en varios lugares, pero el gerente del motel había estado en lo correcto. No había cuartos disponibles.
“Lo siento, niños. Sé cuánto querían pasar la noche en Oaxaca”, dijo papá. “El próximo año haremos reservaciones. Pero ahora vamonos a ver la obra navideña”.
Cuando la obra teatral comenzó, Micaela todavía se sentía muy triste por no haber encontrado una habitación para quedarse. Hubiera sido divertido.
Observaron cómo José y María viajaron a Belén. Luego José tocó a la puerta del mesón. Él buscaba un cuarto para ellos. El mesonero les dijo que no había cuarto.
“¡Mamá, papá!”, murmuró Micaela con sorpresa. “¡Eso es lo que nos sucedió! Oh, sé exactamente cómo se han debido sentir. Después de un viaje tan largo y luego, ¡no hay habitaciones! ¡Qué triste!”
“Sí, y en este caso ¡no podían dar la vuelta y regresar!”, dijo Carlos. “Venían de muy lejos”.
De vuelta a casa esa noche, Micaela dijo, “En esa obra el hombre dijo que Dios envió a Jesús a la tierra porque Él nos amaba. ¿Por qué ese mesonero no pudo encontrar un buen cuarto para Él? Si yo hubiera sido el mesonero, entonces les habría dado alojamiento a José y María. Entonces Jesús habría nacido en un lugar bonito”.
“Sí, Dios realmente amaba al mundo, Micaela”, dijo papá. “Y Él lo demostró enviando a Jesús, Su mejor Regalo. El mesonero no pudo encontrar un cuarto bonito para Jesús, pero tú y Carlos aun pueden hospedarlo. Tú puedes darle una habitación en tu corazón”.
Esta lección se centra en la historia navideña del nacimiento del Niño Cristo. Ayude a su hijo a hacer un adorno del Bebé Jesús de manera de centrar su atención en este acontecimiento importante.
Haga que su niño recorte un círculo de unos 15 cm de diámetro, utilizando un trozo de papel blanco. Dígale que dibuje un bebé en el círculo con la cabeza a unos centímetros del borde del papel. Pliegue los lados izquierdo y derecho del círculo como una manta que cubre al bebé. Luego doble la parte inferior también y sobre el mismo escriba un versículo tal como, “Nos es nacido un niño” – Isaías 9:6.
Versículos para ayudar a su hijo a comprender esta lección Bíblica. DOMINGO: 1 Juan 4:10 | LUNES: Isaías 9:6 | MARTES: Miqueas 5:2 | MIÉRCOLES: Mateo 1:22-23 | JUEVES: Lucas 2:1 | VIERNES: Lucas 2:11 | SÁBADO: Gálatas 4:4-5