Un Gran Cambio/La Mente

TEXTO: Romanos 8:5-9; Filipenses 2:3; 4:4-9

ESCRITURAS COMPLEMENTARIAS: 1 Crónicas 28:9; Lucas 12:29; Hechos 17:11; 1 Corintios 1:10; Hebreos 10:16

OBJETIVO

Los estudiantes podrán explicar por qué es importante entregarle a Cristo nuestra mente y pensamientos.

VERSO CLAVE PARA LA RESPUESTA:
Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera. — Isaías 26:3

VERSO CLAVE PARA LA BÚSQUEDA:
Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él. — Proverbios 23:7

INFORMACIÓN DE REFERENCIA

El objetivo del texto de Filipenses es para demostrar que el Evangelio de Cristo requiere que todos los que proclaman ser cristianos tengan la mente como era la de Cristo. El cristiano debe caminar como Cristo caminó. Ellos no pueden escoger cuales virtudes ellos llevarán a cabo, pero deben traerle honor a Dios en todo lo que hacen.

La paz de Dios es sentida por todos aquellos que le han dado su corazón a Él, pero no puede ser explicada por ninguno, porque sobrepasa todo entendimiento. Solamente sabemos que Cristo mantiene paz en ese corazón en el cual Él mora y gobierna

Proverbios 23:7 nos dice que como un hombre piensa en su corazón, tal es él—esta es una declaración poderosa. El poder de razonar y recordar del hombre son los trabajos de su mente pero la condición de su corazón provoca sus pensamientos. Que importante es entonces el tener un corazón que esté recto con Dios. La Biblia describe la mente de una persona no regenerada como apartada, rencorosa, corrompida, ciega, hostil e impura. Estos mismos términos pueden ser aplicados al hombre en sí. La mente regenerada (corazón) es descrita como dispuesta, pacífica, recta, renovada, teniendo la mente de Cristo, obediente—todo los términos igualmente describen al cristiano.

INTRODUCCIÓN

En Proverbios 23:7, aprendemos que así como un hombre piensa en su corazón, así es él. Nuestras acciones casi siempre preceden de nuestros pensamientos. Ya que le hayamos entregado nuestro corazón y mente a Cristo y hayamos verdaderamente nacido de nuevo, nuestros deseos los cuales son pecaminosos son cambiados por aquellos que son puros y santos. Sin embargo, mientras estamos aquí en la tierra, podemos ser tentados a pensar en hacer lo malo. Por lo tanto, es importante que hagamos un esfuerzo consciente para apartar nuestra mente de lo pecaminoso y dirigirla hacia lo bueno. Con nuestra nueva naturaleza santa, debemos continuar viviendo con mentes controladas por el Espíritu de Dios.

PREGUNTA/RESPUESTAS

1. No podemos ignorar la maldad en el mundo. Los cristianos aman a los pecadores pero odian el pecado que ellos comenten. Recorte artículos de periódicos o revistas que ilustren algunas de las maldades que nos rodean, y otros, ilustren el cristianismo en acción. Anote su reacción a estos artículos.
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   (Maestro, esté preparado con sus propios recortes.)
   Brevemente revise los recortes que sus estudiantes llevaron. Discuta qué tipo de artículo ellos disfrutan leer. ¿Por qué? ¿Cómo afecta sus emociones las cosas que ellos leen y las cosas en las que piensan? Haga un enlace con el texto de Filipenses 4:8, discutiendo la importancia de las cosas en las cuales ellos piensan.
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2. Encuentre el significado de la palabra meditar.
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   Permita que varios de sus estudiantes compartan sus definiciones. Enfatice en el hecho de que la meditación toma tiempo, que debe ser hecha en lo profundo, y que el tema realmente debe ser “entendido” y detallado. Aplique este amplio entendimiento a la palabra meditar a las siguientes Escrituras: Josué 1:8; Salmo 1:2; 1 Timoteo 4:15.
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3. Mencione algunos personajes del Antiguo Testamento quienes meditaron frecuentemente en la Palabra de Dios.
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   Algunas respuestas posibles podrán incluir a Isaac (Génesis 24:63). David (Salmo 63:6), Josué (Josué 1:8). Pídales a sus estudiantes que mencionen algunos beneficios de meditar en la Palabra de Dios. Las Escrituras mencionadas anteriormente en Josué 1:8 y Timoteo 4:15 hablan de beneficios específicos. Guíelos a una respuesta que enfoque el crecimiento espiritual, y el potencial para una fuerza más vibrante para ser testigo a los demás.
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4. Escoja una Escritura en la que usted haya meditado sobre ella en algún momento en su vida de la cual cosechó una visión Espiritual o fuerza. Escriba esta Escritura y lo que significó para usted.
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   Permita que algunos compartan sus Escrituras y pensamientos personales relevados por medio de la meditación.
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5. Escriba Salmo 119:148 en sus propias palabras.
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   Permita que alguien lea su versión. Discuta el hecho de que el tiempo individual para la meditación puede ser en cualquier momento que el Señor se lo ponga en su corazón.
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6. Salmo 143:5 nos da las cosas apropiadas en las cuales meditar. Lea el verso y luego dé un ejemplo específico para cada una.
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   Deje que un estudiante lea el verso en voz alta. Luego permita que otros den sus ejemplos recordando los “días antiguos,” meditando sobre “todas tus obras,” y las “obras de tus manos.” Podría ser interesante discutir brevemente la diferencia entre las últimas dos frases. Quizá “todas tus obras” se refieren a las situaciones y esfuerzos de Dios con el hombre, mientras que “las obras de tus manos” se refieren a Su creación.
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7. Se ha dicho que hasta lo bueno y lo necesario pueden apartarnos de algo mejor, lo cual puede a su vez, apartarnos de lo óptimo. Explique cómo puede ser esto con referencia acerca de lo que pensamos.
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   Su discusión debe resaltar que puede ser fácil permitir que sus mentes se llenen con eventos y circunstancias de sus vidas. Estas cosas pueden ser cosas buenas. El cristiano probablemente no será tentado a pasar tiempo pensando en las cosas que son mundanas o pecaminosas. Pero aun las cosas buenas en sus vidas podrán ocupar mucho de su atención de modo que no apartan suficiente tiempo para meditar sobre las cosas que pueden ser de ayuda para su desarrollo espiritual.
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8. Isaías 26:3 da un beneficio cuando mantenemos nuestras mentes fijas en Dios. ¿Cuál es?
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   Paz perfecta. Su análisis puede centrarse alrededor de cómo los hombres de hoy están buscando la paz en diferentes lugares. Pídale a su clase que nombren algunas de estas cosas. La respuesta para obtener la paz verdadera se encuentra en esta Escritura. ¡Qué importante es permitir que sus mentes piensen en Cristo!
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9. Pedro nos exhorta a “creced en la gracia, y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo” (2 Pedro 3:18). Aun Jesús “crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres” Lucas 2:52. A la luz de la lección de hoy, escriba aquí la acción que planea tomar para aumentar su estatura cristiana.
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   La respuesta obvia sería meditar en la Palabra de Dios. Otra respuesta podrá ser leer la Palabra de Dios un poco más.

PROVOCANDO EL PENSAMIENTO: Al final de un horario regular de trabajo, haga una evaluación de cuantas veces durante el día su mente se inclinó en la Escritura, un himno, la presencia de Cristo, la necesidad de ver a sus compañeros de trabajo salvos, una oración, o cosa igual etc.

PREGUNTAS COMPLEMENTARIAS

• Discuta Filipenses 4:4. ¿Qué significa “regocijarse en el Señor siempre”?
• ¿Cuáles son algunas de las cosas que el Señor ha hecho por usted de las cuales puede regocijarse?
• ¿Sobre qué cosas debemos pensar de acuerdo a Filipenses 4:8? Dé algunos ejemplos.
• ¿De qué manera podemos resistir los pensamientos mundanos?
• ¿Qué efecto tendrán sobre nosotros los pensamientos mundanos? ¿Y sobre nuestra vida espiritual?
• ¿Cómo nos damos cuenta cuando otras cosas llegan a ser más importantes?
• Considere la historia de LA RESPUESTA y diga lo que usted piensa que algunos de los viejos amigos de Hugo podrían decirle. ¿Cómo podría él contestarles?
• ¿Qué efectos tendrán la preocupación, la duda, la desunión, la alteración mental o la alteración espiritual en nuestra vida espiritual?
• ¿Qué significa mente carnal? ¿Mente espiritual?
• ¿Por qué es importante que nos mantengamos vigilando en lo que permitimos que nuestras mentes se detengan a pensar?
• ¿Cómo reflejan su mente (y hablar) lo que está en su corazón?

COSAS QUE HACER

Haga algunas (TARJETAS ILUSTRATIVAS DE REACCIONES) con dibujos de cosas o situaciones. Haga una pregunta o una declaración mientras muestra a los niños las tarjetas ilustrativas. Deje que los niños le digan cuál sería la reacción posible de un cristiano en contraste a la posible reacción del que no es cristiano. Ejemplos: Una chaqueta rota —“Roberto lleva puesta una chaqueta vieja a la escuela.” “Cruz—¿qué le recuerda esto? Juguetes quebrados—“Julia quebró el juguete nuevo de Andrés. “Carro chocado—José fue herido porque estaba manejando deprisa.”

Muestre a sus estudiantes una botella la cual tenga manchas de lodo o que esta muy sucia por dentro para representar la mente carnal contaminada por los pensamientos del mundo. Dígales que la botella (la mente) debe ser limpiada si se va a usar de nuevo. Use un frasco de vidrio con agua que representa a Cristo, y muestre cómo sólo Jesús puede limpiar la mente. Solamente cuando nuestras mentes han sido limpiadas de los pensamientos del mundo pueden entrar los pensamientos nuevos y hermosos. Enjuague la botella sucia con agua del frasco para demostrar esto. Luego llene la botella limpia con agua limpia y con flores.

Discuta las maneras que podemos mantener nuestros corazones y mentes diariamente en lo bueno, lo puro, lo virtuoso aun cuando tantas cosas malas nos rodean.

En una pizarra o proyector, haga una lista de artículos dados en Filipenses 4:8, y pídale a la clase que den ejemplos de la vida real de cada uno.

Escoja varios versos que se traten de cómo mantener nuestra mente y pensamientos en Cristo; por ejemplo, Salmos 19:14; 48:9; Proverbios 12:5; Isaías 26:3; Romanos 8:6; 1 Corintios 2:16; Filipenses 2:5; 4:8; 1 Timoteo 4:15. Escriba cada verso en diferentes pedazos de papel. Entregue el verso, a cada uno de los estudiantes. Tenga una lista de preguntas que hagan par con cada verso. Ejemplo: Quién se acordó de tu misericordia.” El niño que tenga el papel con el Salmo 48:9 escrito sobre el podrá contestar esa pregunta.