TEXTO: Lucas 14:16-24
OBJETIVO
Los estudiantes estarán en la capacidad de explicar que aunque muchas personas inventan excusas para no servir a Dios, ninguna excusa valdrá ante el escrutinio del Todopoderoso. Si persistimos en excusarnos, otros asumirán nuestra responsabilidad y al final recibirán nuestra recompensa.
VERSO CLAVE PARA LA RESPUESTA:
Venid, que ya todo está preparado. — Lucas 14:17
VERSO CLAVE PARA LA BÚSQUEDA:
Un hombre hizo una gran cena, y convidó a muchos. Y a la hora de la cena envió a su siervo a decir a los convidados: Venid, que ya todo está preparado. Y todos a una comenzaron a excusarse. — Lucas 14:16-18
INFORMACIÓN DE REFERENCIA
Las personas han estado haciendo excusas para no servir a Dios desde que ha habido personas sobre la tierra. Nuestra primera grabación de una excusa fue cuando Adán culpó a su esposa por darle el fruto prohibido. Eva siguió el ejemplo de su esposo y culpó a la serpiente. Realmente, Adán implicó que Dios tenía también la culpa. Él dijo: “La mujer que me diste para compañera, me dio del árbol, y yo comí.” Por supuesto que Dios no aceptó sus excusas y tampoco aceptará excusas hoy.
Muchas personas culpan a Dios por sus problemas o sus circunstancias, pero el problema es el pecado. Las circunstancias pueden causarnos a tener dificultades, pero Dios ha provisto el modo para que tengamos paz en nuestros corazones, no importa cual sea la situación. En Romanos 8:35-39, aprendemos que nada podrá separarnos del amor de Dios, de modo que si encontramos pecado en nuestras vidas, es porque hemos fallado en nuestro caminar con el Señor y no tenemos excusa. El Rey Saúl, el primer rey de Israel, transgredió el mandamiento del Señor. Aunque él hizo una excusa, Dios no la aceptó. Dios dijo que le quitaría el reino a Saúl y que se lo daría a uno que fuera conforme a Su corazón.
El rey Saúl sabía lo que Dios esperaba de él, pero escogió desobedecer. Quizás otros no tengan la luz que tenía Saúl, pero Dios declara que Él ilumina a cada hombre que viene al mundo (Juan 1:9). Pablo dice que el poder y la Deidad eterna de Dios están claramente reveladas en su creación de modo que todos los hombres están sin excusa (Romanos 1:20).
INTRODUCCIÓN
Jesús no tenía ilustraciones en cuanto a la recepción general de Su Reino. Él sabía que muchos de los líderes religiosos de su propio pueblo y personas de la misma nación, hasta los gentiles lejanos, lo rechazarían a Él y a su ofrecimiento de redención eterna. Darían las excusas más triviales, profiriendo para ellos mismos los bagazos del mundo. El diccionario define la palabra excusa cómo “1. una disculpa o explicación dada en defensa de la conducta de uno, 2. un alivio de la obligación, deber, etc. 3. algo que excusa; un factor atenuante o justificante, y 4. una razón fingida para una conducta; un pretexto.”
PREGUNTA/RESPUESTAS
- Estudie las definiciones de la palabra excusa. En nuestra parábola, todos los que fueron invitados pidieron ser excusados. ¿Cuál de las cuatro definiciones aplica mejor?
Permita que sus estudiantes den explicaciones de sus selecciones. Mientras que los cuatro podrían aplicar en algún sentido, la mejor definición posible es la cuarta. Mencione la diferencia vasta entre una excusa ofrecida y una excusa aceptada. El número 4 muestra que las razones dadas eran sólo pretextos si ese hubiese sido su deseo.
- El hombre que había comprado la hacienda solicitó que fuera excusado de la cena. ¿Cuáles son algunas de las excusas ofrecidas hoy para no servir a Dios? ¿Cuál es la razón primaria detrás de estas excusas?
Después de escuchar varias excusas ofrecidas para no servir a Dios, pregúnteles a sus estudiantes si estas excusas suenan mejor que las que son ofrecidas en el texto. Mencione que son sólo una pobre alternativa a una negativa. Las personas que se excusan a sí mismos de servir a Dios no desean servirle, de modo que escogen otra cosa en vez.
- Una de las racionalizaciones más ofrecida para hacer una excusa en nuestro día es el pensamiento de que, “lo haré más tarde.” ¿Cuál es el peligro de demorar en relación al destino eterno de uno?
Sus estudiantes deben denotar el peligro de posponer el volverse al Señor, comprendiendo que es posible retrasarlo hasta que sea demasiado tarde. Se llega al punto donde la línea es cruzada, y la oportunidad de aceptar la misericordia de Dios es perdida para siempre. El hombre no sabe precisamente cuando ese punto llega a su propia vida, entonces hay que asegurarse urgentemente que la preparación sea hecha hoy mismo. Lea 2 Corintios 6:2.
- ¿Cuál fue la excusa de Adán por haber comido la fruta prohibido (Génesis 3:12)? ¿Excusó Dios a Adán? ¿Por qué o por qué no?
Su excusa fue que su esposa le dio la fruta, pero Dios no excusó a Adán por su pecado. Dios no puede pasar por alto el pecado; esto incluiría el pecado de negligencia. Lea Hebreos 2:3. Mencione que Dios puede ver el verdadero deseo del corazón a pesar de las excusas ofrecidas.
- El hombre que se había casado dijo: “No puedo ir.” En realidad, piensa usted que él pudo haber ido? Explique.
En realidad, probablemente él pudo haber ido y llevado a su esposa con él. Él pudo haber preguntado si la invitación la incluía. O quizás ella no se hubiese opuesto a que él fuera solo. Pero aparentemente él no hizo ningún intento para hacer cualquiera de estos arreglos. Pida a sus estudiantes que definan la diferencia entre “no poder” y “no querer hacer,” mencionando que frecuentemente el no poder realmente significa no querer hacer. Enfatice la necesidad de establecer prioridades correctas.
- Si usted fuera pastor, ¿cómo desearía que una persona reaccionara cuando usted le pidiera que hiciera algo en el servicio de Dios? Con relación a este pensamiento, explique 2 Corintios 8:12.
Las respuestas de sus estudiantes sin duda mencionaran que un pastor desearía una respuesta dispuesta. Dé tiempo para que ellos ofrezcan sus explicaciones del verso, enfocando sobre el pensamiento que Dios acepta a un hombre como es y por los talentos que él tiene. Dios no espera que la persona sea algo que él no puede ser. Sin embargo, Dios puede dar gracia y añadir talentos al habitado para hacer más de lo que él pensaba posible mientras que él se sujeta a sí mismo a Él. Pida ejemplos personales a los estudiantes donde ellos le dijeron sí a Dios y recibieron ayuda para ejecutar su obra en lo que ellos consideraban una tarea difícil.
- ¿Qué resulta cuando pedimos ser excusados de hacer una tarea específica en el servicio de Dios?
Esta pregunta debe generar mucha discusión en relación con las actitudes que motivan la excusa. Hay momentos cuando a una persona se le podría pedir ocupar una posición en la cual realmente se requieren más fuerza y atención de las que él está capacitado en dar. En ese momento, lo que podría ser considerado una excusa se ve como una razón adecuada para no aceptar la responsabilidad, no se debe a la falta de deseo o voluntad, pero más bien es enfrentarse de manera realista a las limitaciones de uno. Del otro lado, una persona podría excusarse a sí mismo debido a restricciones físicas o por falta de tiempo, cuando en verdad ningunas de estas podrían ser en realidad factores ilimitados si él hubiese tenido una actitud voluntariosa. Uno con este tipo de excusa se dará cuenta que también él se ha excusado a sí mismo de recibir la recompensa de Dios.
- ¿Cuál es la cena a la cuál todos estamos invitados (Apocalipsis 19:9)? ¿Qué les espera a aquellos que aceptan la invitación a la Gran Cena de Dios?
Todos están invitados a la fiesta de la Boda del Cordero. Discuta las bendiciones que están disponibles para aquellos que aceptan responsabilidades y privilegios en el servicio de Dios. Concluya su clase discutiendo la esperanza bendecida del cristiano, y que algún día asistirá a este gran evento si permanece fiel.
PREGUNTAS COMPLEMENTARIAS
- En la parábola, ¿por qué estaba enojado el hombre que ofrecía la cena? ¿Estaba más enojado porque los invitados no vendrían o por las excusas que ellos hicieron? ¿Por qué?
- Nosotros, cómo los invitados, estamos invitados y llamados a servir a Dios. ¿Qué excusas están haciendo muchos hoy?
- ¿Cuál es la idea principal en cuanto a esta parábola? ¿Qué trata de enseñarnos Jesús?
- ¿Qué pierde realmente cuando comienza a inventar excusas para no hacer la obra de Dios?
- ¿Les pidió el anfitrión de la cena que vinieran los invitados una segunda vez? ¿Qué advertencia nos da esto?
- ¿Por qué es importante “apresurarse” para llegar a la cena? Haga una comparación espiritual.
- ¿Por qué es fácil excusarse de algo desagradable o inoportuno, y tan fácil abstenerse de inventar excusas si obtendrá algo?
- ¿Qué es una excusa? ¿Cómo difiere una excusa de una explicación?
- ¿Cómo se siente cuando alguien le da una excusa a usted?
- ¿Qué estuvo mal en las excusas inventadas en nuestra parábola?
- ¿Por qué inventan excusas los pecadores para no ser salvos?
COSAS QUE HACER
Haga que los estudiantes piensen en las consecuencias que resultan cuando se hacen excusas. Invéntese situaciones como el hacer los quehaceres del hogar, el hacer las tareas de la escuela, o estar citado para presentarse a la corte. Haga que los estudiantes den alguna excusa para no hacer lo que les corresponde, y luego que piensen en lo que pasaría si ellos siempre evadieran cumplir lo que se les exige. ¿Qué sucede cuando hacen lo mismo con sus obligaciones en el servicio de Dios?
Haga un concurso para ver quien puede escribir la excusa más chistosa para no asistir a una cena. Después que los estudiantes lean sus excusas, pídales que se imaginen ¿cómo se sentirían si esas mismas excusas se les fuera a dar a ellos mismos? ¿Cómo se siente Dios cuando la gente ofrece excusas para no servirle? Enfatice que, aunque el concurso de las excusas más chistosas fue divertido, Dios no se reirá si hacemos pretextos para no servirle.
Entregue una invitación a una cena a cada miembro de la clase. Úsela cómo su apertura para esta lección. La invitación podría ser escrita como lo siguiente:
Está invitado a
UNA GRAN CENA
que será celebrada en el Cielo
para todos los que han creído en Jesús
cómo Salvador.
Por favor marque su respuesta
a esta invitación abajo.
¡Gracias por la invitación! Acepto con gran placer.
Lo siento, no puedo asistir. Debo ir al infierno porque
________________________________________________________
________________________________________________________