Una Oportunidad Más/La Higuera

TEXTO: Lucas 13:6-9; Juan 15:1-8

OBJETIVO

Los estudiantes estarán en la capacidad de explicar que el Señor espera fruto de nuestras vidas. Aunque quizás Él posponga el juicio, vendrá el tiempo cuando quienes no den fruto serán castigados eternamente.

VERSO CLAVE PARA LA RESPUESTA:
Y si diere fruto, bien; y si no, la cortarás después. — Lucas 13:9

VERSO CLAVE PARA LA BÚSQUEDA:
Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto. — Juan 15:2

INFORMACIÓN DE REFERENCIA

La higuera es muy común en la tierra de Israel y es mencionada en Deuteronomio como una de las bendiciones que los hijos de Israel encontrarían en la tierra de Canaán. El sentarse debajo de su propia viña y árbol de higos era una expresión entre los judíos para denotar paz y prosperidad. Lea 1 de Reyes 4:25.

En varias ocasiones, Cristo usó la higuera como un símbolo de la nación judía. Un comentador explica esta parábola en la siguiente manera. El hombre es Dios, la higuera es la iglesia judía, y la viña es la tierra de Judá. Dios buscó fruto, indicando que Él esperaba que la iglesia judía produjera fruto de justicia. El viñador es Jesús y los tres años son los años del ministerio de Jesús. La palabra “Córtala,” sugiere que Dios permitiría que los Romanos vinieran y destruyeran la nación. El viñador, Jesús, dijo: “Déjala todavía.” Él le daría más cuidado, y entonces si no daba fruto, podría ser cortada. Triste es decir, que hubo pocos resultados a los esfuerzos de Jesús y la nación fue destruida por el ejercito Romano en el año A.C. 70.

En muchas partes de las Escrituras somos advertidos a producir fruto. Debemos estar seguros de no ignorar esta parábola y fallar en ver una advertencia en ella para nosotros.

INTRODUCCIÓN

Jesús a menudo usaba árboles, jardines, viñas, ramas, y frutos para enseñar lecciones de la verdad. La vida de un cristiano es cómo un árbol, no solamente un árbol con hojas, pero un árbol que da buenos frutos. Como en lo natural, el fruto es el producto del crecimiento de una planta, de modo que es solamente por el crecimiento espiritual que el hombre da fruto al Señor. Sin crecimiento, uno llega a ser estéril, resultando en castigo eterno. Sin embargo, mientras andamos en los mandamientos de Dios, estamos en la capacidad de dar el fruto esperado.

PREGUNTA/RESPUESTAS

1. En varias ocasiones, Cristo usó la higuera cómo un símbolo de la nación Judía. Esta parábola ilustraba la paciencia de Dios con Jerusalén, cuyo día de Juicio se estaba acercando debido a su fracaso de dar fruto de justicia. Sin embargo, también hay una advertencia en ella para los individuos. Explique ¿cómo cree usted que esta parábola se nos aplica?
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   Mientras sus estudiantes discuten esta parábola, el punto que se debe mencionar es que también en nuestras vidas, Dios está buscando fruto, evidencia de la gracia del cristianismo verdadero. Si esto no transpira, el Señor quizás extienda misericordia por un tiempo debido a la mediación de nuestro defensor, Jesús. Pero en el final, seremos sentenciados eternamente por nuestro continuo fracaso en mostrar evidencia de una vida cristiana y fructífera.
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2. ¿Qué hizo el viñador para tratar de aumentar la producción de la higuera?
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   El verso 8 nos dice que Él pidió que se le concediera un año más para cavar alrededor de la higuera y fertilizarla. Cristo no le pidió a Dios que perdonara la esterilidad, pero le pidió a Dios que le permitiera trabajar con el árbol para que llegase a ser fructífero. Pida a sus estudiantes que den algunas maneras en las cuales Dios pacientemente trata con los individuos, tratando de traerlos a darse cuenta de su necesidad de dar fruto.
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3. ¿Por qué tenía derecho el dueño de la viña de esperar fruto?
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   Sin duda, sus estudiantes responderán que Él tenía el derecho por que Él era el dueño de la higuera. Él había comprado el árbol y lo había colocado en su viña. En el mismo sentido, Dios tiene el derecho de esperar que el cristiano produzca fruto espiritual. Él no esperaría que aquellos del mundo produjeran fruto para Él. El precio ha sido pagado, pero hasta que el pecador acepte el pago hecho para él, no es sembrado en la viña de Dios.
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4. Mirando a nuestro texto en Juan 15, ¿cómo vamos a producir fruto? Explique.
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   Hemos de producir fruto por medio de permanecer en la viña. Pida a sus estudiantes que discutan la frase, “Permaneced en mí.” Deben notar el hecho de que las ramas toman sus fuerzas de la viña. Pida que ellos piensen en formas específicas en que podamos “permanecer” en Cristo y ser cristianos productivos. Quizás mencionaran que esto puede ser hecho por el estudio de la Palabra de Dios, por la oración, por la consagración personal, y buscando la voluntad del Señor en cada aspecto de la vida. Debemos reconocer que “permanecer” no es un estado pasivo, se requiere esfuerzo determinado y persistencia con el propósito de ser mantenido.
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5. ¿Qué les hace Dios a las ramas que producen fruto? ¿Cuánto fruto debemos producir?
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   Dios purifica las ramas que producen frutos. Debemos producir “fruto” “más fruto” y “mucho fruto.” Pregúnteles a los estudiantes ¿por qué creen que Dios purifica las ramas que producen fruto? Trace un paralelo entre la purificación de Dios y el hortelano cuando poda los árboles en su huerto. A menudo se poda una rama de modo que otra rama pueda ganar fuerza. Un árbol creciendo sin ser podado pronto es desfigurado. Descuidado, un árbol crece demasiado espeso para permitir que la luz del sol entre en el medio de el. Al pasar el tiempo, el fruto entonces llega a ser más pequeño y menos deseable. En la misma manera, un cristiano no puede prosperar sin el cuidado y la atención de Dios.
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6. Dios le importa cada rama. Cada rama tiene el nutrimiento y la oportunidad de dar fruto. Cada rama recibe “los rayos del sol y la lluvia” del amor de Dios. ¿Qué le sucede a la rama que no produce fruto?
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   Es arrancado y es marchitado y quemado. Ayude a los estudiantes a reconocer que uno que ha sido salvado, pero que no continúa produciendo fruto espiritual, será perdido. Su fin será perderse por la eternidad en el fuego del infierno si no se arrepiente de su apostasía (regreso al pecado).
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7. ¿Qué fruto espera Dios ver en una vida? Dé un ejemplo específico de cómo cada uno es un beneficio espiritual.
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   Usando las respuestas de los estudiantes, ponga en lista varios frutos espirituales. Quizás desea referirse a Gálatas 5:22-23. Discuta con los miembros de la clase la necesidad de producir todos éstos frutos como deben. Mencione que el fruto del espíritu es para todo aquel que es salvo, y que Dios desea que todos tengan el beneficio completo de ellos.
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8. Si uno descubre que no está dando la cantidad de fruto que debería, ¿qué cree que él debe hacer para mejorar?
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   Las respuestas de sus estudiantes a esta pregunta debe proveer un buen resumen a la lección. Pregúnteles a sus estudiantes qué papel tienen ellos en mejorar su productividad espiritual. Deben ver la necesidad de pedirle al Señor el hacerlos más disponibles en aceptar la podadura y cultivación que Él hace en sus vidas. Refiérase a Proverbios 3:11-12, y Hebreos 12:11.

PREGUNTAS COMPLEMENTARIAS

• ¿Cómo podemos saber si somos cristianos que producimos fruto o no?
• ¿A quién representa “el hombre”? ¿A quién representa “el viñador”? ¿Qué representa “la higuera”?
• ¿Qué indica Lucas 13:8-9 acerca de la misericordia y el juicio de Dios?
• Compare cada uno de estos deberes de jardinería con el cuidado espiritual que se necesita para producir fruto espiritual: sembrando buena semilla, preparando la tierra, fertilizando la tierra, rociando y limpiando con azadón, y desyerbando y cultivando. 
• ¿Qué nos dice Gálatas 5:22-23 sobre qué es el fruto esperado de la vida de un buen cristiano?
• En nuestra historia de la RESPUESTA, ¿por qué fracasaron las plantas de fresas que plantó Gerardo? ¿Por qué decidió él darle una segunda oportunidad? Compare las plantas de fresa de Gerardo con la vida de un cristiano, notando el cuidado y la atención necesaria para ambos.

COSA QUE HACER

Traiga a la clase una planta que no parece estar creciendo. Mencione que ésta debe ser una planta que florece, pero que no tiene flores. Cuente cómo usted la ha fertilizado, la ha rociado, y la ha movido, etc., pero no ha florecido. Discuta con la clase que piensan ellos que usted debería hacer con ella.

Traiga una planta a la clase y tenga una lección sobre la podadura. Explique el propósito, y por qué es beneficioso.

Muéstreles a sus estudiantes un dibujo sencillo que usted ha hecho. Mencione por qué usted no está satisfecho. Concluya destruyendo el dibujo. Resalte que como usted lo hizo, usted tiene el derecho de ponerlo en un marco y exhibirlo si usted lo desea. Pero que también tiene el derecho de destruirlo si no esta satisfecho. Dios nos creó, y si Él no está complacido con nosotros, Él tiene el derecho y el poder de condenarnos a la muerte eterna.

Traiga un libro diario a la clase. Pídales a sus estudiantes que consideren este punto. Que si Cristo fuera a leer un diario de los eventos de sus vidas, ¿encontraría Él evidencias de fruto espiritual en sus acciones de cada día?