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¿Qué Hay de Especial del Día Domingo?

Currículo
Respuesta para Estudiantes
139
TEXTO: Isaías 58:13-14; Mateo 12:1-13

Jerry se fue enojado cuando su padre prohibió el viaje de pesca.

“BUENO JERRY, ¿quieres que le diga mi papá que tú vendrás?”
“De seguro que quiero ir, pero mis padres no me permitirán ya que ustedes se van el domingo.”
“¿Qué importa? El día domingo es solamente otro día, ¿no es así?”
“Así no piensán mis padres, Luis. Yo les pediré permiso, y después te llamaré. Tal vez si tengo suerte me dejen ir.”
Cuando Jerry llegó a casa, su padre estaba cortando el césped de enfrente de la casa.
“Papá, quiero pedirte un favor.”
“¡Seguro, Hijo, dime!”
“¿Me permites ir de pesca con Luis y su papá?” “Bueno, pienso que sí. ¿Cuándo se irán?”
“Como a las seis de la mañana el día de mañana.”
Su padre se quitó los guantes y se recostó sobre el guardafango del auto. Mirando a Jerry le preguntó: “¿El domingo? Creo que quedarías decepcionado en mi, Hijo, si te permito ir en el día del Señor. ¿Cierto?”
Molesto cuando recibió la respuesta esperada, Jerry agarró su bicicleta y se fue pedaleando rápidamente en la calle. Rápido y más rápidamente, pasándole a otro ciclista. Cuando llegó a una curva en la calle, su llanta se topó con un poco de arena. Perdiendo el control, se cayó estrepitosamente de su bicicleta. Otro ciclista se paró a su lado.
“¡Jerry! ¿Estás bien?”
“Creo que estoy bien, sólo que me raspe el brazo. ¿De dónde veniste, Ricardo? Yo no te vi.”

VERSO CLAVE: El día del Señor es un día especial.
Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor. — Apocalipsis 1:10

“Yo te he estado siguiendo por dos cuadras. ¡Estabas manejando cómo un hombre loco! ¡Estuviste a punto de ser atropellado por un auto! ¿Qué es lo que te sucede?”
“¡Lo que sucede es que estoy molesto con mis padres!”
“¡Estás bromeando! ¿Estás molesto con tus padres?”
“Sí. Sólo son reglas, reglas, reglas. Bueno, y qué sabes tú acerca de mis padres?”
“Los conozco de la iglesia. A ver, permíteme ayudarte a enderezar el manillar.”
Mientras los dos intentaban enderezar el manilla de la bicicleta, Jerry le contó a Ricardo la situación y cómo algunas veces él desearía que sus padres no fueran cristianos.
Ricardo miró a Jerry con una expresión tan apenada que alarmó a Jerry.
“¿Qué te sucede, Ricardo?” Preguntó Jerry.
“Yo quiero enseñarte algo que regularmente no permito que ninguno de mis amigos vean. Mi casa es aquella azul que está por allá. Vamos y así podemos curar tu brazo.”
Mientras se acercaban a la casa Jerry notó que el césped estaba muy crecido y había basura en él. La puerta delantera estaba abierta de par en par y una montaña de ropa se encontró allí adentro. Jerry no podía creer lo que estaba viendo cuando entraron a la sala. La casa estaba hecha un desastre, un bebé estaba llorando en algún lugar, y el olor a cigarrillo estaba por dondequiera. Una mujer ojerosa entró al cuarto, dijo algo que no se le entendió y luego se fue.
“Esa es mi mamá.” Dijo Ricardo mientras guió a Jerry al baño donde ellos lavaron y le pusieron venda a su brazo raspado. Luego continuaron por el pasillo al cuarto de Ricardo. Tomando su Biblia de la mesita de noche, él miró a Jerry fijamente a los ojos. “Yo te traje aquí, aunque me duelo hacerlo. Yo quiero que te des cuenta lo que tú tienes en tu hogar realmente. Viste a mi madre, pero espero que no veas a mi padre. Nosotros los niños tratamos de estar en cama cuando él llega a casa. Él toma mucho. Sabes, yo he estado yendo a la Escuela Dominical en tu iglesia hace ya un año ahora. Hace cinco meses ore y el Señor me salvó. Tus padres oraron conmigo y han estado ahí para darme ánimo en todo el camino. Yo siempre me preguntaba por qué tú nunca estabas orando con ellos. Y ahora creo que sé el motivo, pero no entiendo por qué.”
Jerry estaba ahora sentado tranquilamente, con su cabeza colgada hacia abajo.
“Pero Jerry, yo entiendo por qué ellos mantienen el domingo santo como el día del Señor. Cuando el Señor entró en mi corazón sentí que por fin había esperanza para mí. El día domingo siempre será un día especial para mí. Fue en ese día que Jesús se levantó de la tumba después de morir en la cruz por mis pecados, y por los tuyos también, Jerry. Yo quiero honrarle dándole ese día especialmente a Él. Yo creo que tus padres sienten lo mismo . . . y yo daría cualquier cosa que mi hogar fuera cómo el tuyo. Por lo menos tú sabes que tus padres se preocupan por ti.”

ACTIVIDAD DE LECCIÓN: Sugerencias para el Domingo